Lo sé, lo sé, venir a estas alturas de la vida con una valoración sobre las Navidades pasadas queda un poco desfasado, pero es lo que hay, hoy me ha llegado la inspiración.
Una cosa buena de las Navidades es que en mi curro no hay curro (valga la redundancia) y eso me permite ciertas licencias, como son mirar películas (con la connivencia de mi señora jefa, por supuesto). Sentí la soledad de "Lost in translation", me enamoré con "Her", me perdí un poco con "In the mood for love" y recapacité con "Un feliz acontecimiento". Esta última peli la recomiendo especialmente todas las que sois madres (y padres, si me léeis, que aquí somos casi todo chicas). No me parece una obra cumbre del séptimo arte, pero hace un repaso fenomenal a la maternidad. Lo malo es que hay tantos temas que tocar que por muchos pasa de puntillas e incluso con incongruencias, pero por enumerar unos cuantos habla de los consejos no pedidos, de las suegras metomentodo (pedazo máquina sacaleches le regala a su nuera, instrumento de tortura diría yo), de las crisis de pareja, de las "locas de la lactancia", del colecho... Y en definitiva, del volver a encontrarte como mujer cuando decides convertirte en madre.
La segunda parte de las Navidades me cogí varios días de fiesta para complementar los que se había pillado Mr. X para poder cuidar a nuestro churumbel. Esa diferencia de tiempo libre ejemplificó lo que ya tengo bien aprendido respecto a la crianza. Se entiende rápido con un ejemplo:
Mal
Peque pilla una rabieta. Yo estoy en mitad de cuatro cosas pendientes antes de salir de casa para ir a trabajar. Él me reclama y yo me agobio porque no puedo terminar nada. Acabo perdiendo la paciencia, Peque se cabrea más, intenta pegarme, yo exploto y grito y los dos terminamos enajenados.
Bien
Peque pilla una rabieta. Hoy no curro. Me acerco a él y le hablo con calma. Él sigue berreando y tirando cosas. Intento abrazarlo, pero no me deja. Sigo a su lado y finalmente me confiesa que en el cole un compañero le llama tonto y le pega. Lo hablamos. Nos estiramos en la cama y verbaliza otros temores. Nos abrazamos y me dice que me quiere (explicándome que tiene el corazón lleno de anillos para mí... qué cosa).
Para criar se necesita tiempo, tiempo para organizarse, para poder estar donde toca (en el presente), para poder tener paciencia. Tan fácil. Tan difícil.
Bien
Peque pilla una rabieta. Hoy no curro. Me acerco a él y le hablo con calma. Él sigue berreando y tirando cosas. Intento abrazarlo, pero no me deja. Sigo a su lado y finalmente me confiesa que en el cole un compañero le llama tonto y le pega. Lo hablamos. Nos estiramos en la cama y verbaliza otros temores. Nos abrazamos y me dice que me quiere (explicándome que tiene el corazón lleno de anillos para mí... qué cosa).
Para criar se necesita tiempo, tiempo para organizarse, para poder estar donde toca (en el presente), para poder tener paciencia. Tan fácil. Tan difícil.
Aparte de disfrutar de Peque, mi objetivo durante los días festivos era estar todo lo que pudiese con mi padre. Tanto, que acabó hasta las narices de mí y me pidió un finde libre de hija al acabar las fiestas. Hay que ver... Cría cuervos, que habría dicho mi madre. Pero bueno, estando juntos me explicó todas sus recetas de galletas y esa es nuestra forma particular de conectar y compartir la existencia, entre masas y azúcar en polvo. Las conversaciones en la cocina de papá huelen a canela y se convierten en recuerdos maravillosos.
Me he dado cuenta también de lo grandes y preciosos que están los hijos de Mr. X (nunca admitiré haber dicho esto en su presencia). No puedo decir que haya sido fácil para mí, que venía de una unidad familiar de tres personas, adaptarme a la familia numerosa de mi partenaire. Primero conocí a sus padres, hermanos, cuñados y sobrinos (ciento y la madre) y luego a sus hijos. Y me costó, vaya si me costó. Acostumbrada al silencio, a las conversaciones reposadas, a las reflexiones tranquilas... me vi rodeada de tres churumbeles que tenían por uso hablar a grito pelao -en eso no han cambiado- y liarla parda -en eso tampoco-. Para ser justos, tampoco debió ser fácil para ellos. Nada fácil. Además, yo pensaba sobre la educación de una forma en aquella época (más estricta, más al estilo de mi padre), y convertirme en madre me ha dado otra perspectiva, y ahora entiendo cosas que entonces no podía comprender. Dicen que tener un hijo es una prueba de fuego para una pareja. Para Mr. X y para mí aquello fue la prueba de fuego. Por fortuna el tiempo ha jugado a nuestro favor y hoy en día (y a pesar de las adolescencias, que todo hay que decirlo, están siendo bastante llevaderas -toquemos madera-) hemos construido una relación de la que me siento orgullosa. Las niñas me han sorprendido apoyándome de forma adulta en el trance de la enfermedad de mi padre, acompañando, queriendo ir con nosotros al hospital para estar con él... Peque tiene suerte con los hermanos que le han tocado.
Por cierto, las fiestas navideñas sirvieron además para pintar el volcán-tomate. Pintarlo yo, porque lo que es Peque pasó de su creación absolutamente.
Y a mí que me recuerda a un monigote que salía en un programa de la tele autonómica… Tomatic, se llamaba. Vaya por él:
Me he dado cuenta también de lo grandes y preciosos que están los hijos de Mr. X (nunca admitiré haber dicho esto en su presencia). No puedo decir que haya sido fácil para mí, que venía de una unidad familiar de tres personas, adaptarme a la familia numerosa de mi partenaire. Primero conocí a sus padres, hermanos, cuñados y sobrinos (ciento y la madre) y luego a sus hijos. Y me costó, vaya si me costó. Acostumbrada al silencio, a las conversaciones reposadas, a las reflexiones tranquilas... me vi rodeada de tres churumbeles que tenían por uso hablar a grito pelao -en eso no han cambiado- y liarla parda -en eso tampoco-. Para ser justos, tampoco debió ser fácil para ellos. Nada fácil. Además, yo pensaba sobre la educación de una forma en aquella época (más estricta, más al estilo de mi padre), y convertirme en madre me ha dado otra perspectiva, y ahora entiendo cosas que entonces no podía comprender. Dicen que tener un hijo es una prueba de fuego para una pareja. Para Mr. X y para mí aquello fue la prueba de fuego. Por fortuna el tiempo ha jugado a nuestro favor y hoy en día (y a pesar de las adolescencias, que todo hay que decirlo, están siendo bastante llevaderas -toquemos madera-) hemos construido una relación de la que me siento orgullosa. Las niñas me han sorprendido apoyándome de forma adulta en el trance de la enfermedad de mi padre, acompañando, queriendo ir con nosotros al hospital para estar con él... Peque tiene suerte con los hermanos que le han tocado.
Por cierto, las fiestas navideñas sirvieron además para pintar el volcán-tomate. Pintarlo yo, porque lo que es Peque pasó de su creación absolutamente.
Y a mí que me recuerda a un monigote que salía en un programa de la tele autonómica… Tomatic, se llamaba. Vaya por él:
Pero alma de cántaro, qué vas a hacer con ese pedazo de tomate! Jajajajaja!
ResponderEliminarLa maternidad requiere tiempo, sí, la crianza del día a día muchas veces se convierte en pura supervivencia. Y verbalizar las emociones es importantísimo, hace poco ví el libro "el emocionario", te recomiendo le eches un vistazo.
Como madrastra parece que tampoco se te da mal la cosa, jejejeje!
Jajajajajaja! Yo creo que va a sufrir un accidente un día de estos, pobrecillo... XD
EliminarEse libro lo tengo apuntado para comprarlo, me lo recomendó La Gallina Pintadita y tiene que ser una pasada!
Qué mal suena lo de madrastra! Tampoco me he sentido nunca así, sólo la novia jovencita de papi! (suena peor, jajajajaja!).
Muas!
Totalmente de acuerdo contigo en que para criar hay que tener tiempo y... calma... y paciencia... y... Demasiadas cosas!!! Me alegro mucho de que seas tan feliz.
ResponderEliminarEse tomate mooooola!!
Aix, sí, lo de la paciencia y el tiempo son tópicos típicos, pero taaan ciertos!!
EliminarSí, me considero afortunada. :)
Mola mil! Pero ocupa un millón! XD
Besotes!
Ahora tienes que ir al cole a ajustarle cuentas a la madre del niño pegón, con la frase: "Por cada insulto o empujón que Pedrito le de a Peque, yo te daré dos" xDDDDDDDDDDDD
ResponderEliminarBesos
36+4
Jajajajajajaja, Eva! Eres una mafiosa!! Mejor le digo que por cada insulto le regalo un volcán-tomate, seguro que desiste antes!! XD
EliminarMuas!
Jajaja he pensado lo mismo, dale el volcán tomate y se acojona!
EliminarJajajajaja! Fijo!!! XD
EliminarBesotes sister!
El volcán tomate como arma arrojadiza. Me gusta.
EliminarJajajajajajaja! No tienes remedio! ;)
EliminarMe apunto la peli que recomiendas (para cuando vuelva a tener tiempo para ver una película en mi vida!)
ResponderEliminarLa verdad es que tienes toda la razón, en el día a día vamos tan deprisa a todas partes... Y al final los que lo sufren son ellos.
Respecto a la reflexión sobre los hijos de tu sr. marido, me ha parecido muy bonita. Realmente me pongo en su lugar y tuvo que ser difícil.. Me pongo en el tuyo y también! Que tengáis una relación buena es realmente genial tanto para ellos como para ti (y por supuesto para peque y su papá!)
Feliz día :)
Yo tardé un poco en poder volver a ver pelis, jejejeje... pero todo llega. :)
EliminarLa prisa es uno de nuestros enemigos, no hay duda. Hay que mantenerla a raya o se nos come.
Bueno, fácil no fue, pero en realidad visto en perspectiva nos lo tomamos todos con bastante filosofía. Y desde luego mi ingenuidad fue un punto a favor porque no tenía ni idea de dónde me metía, jajajajaja! (aunque me hubiese metido igual, of course!).
Besotes!
Hola: coincido en tu planteamiento sobre la maternidad... para tener paciencia infinita y poder razonar con nuestros hijos hace falta tiempo y no andar a mil por hora a todas partes. Me reí con tu historia de la rabieta... es tan real!! Ya leo que fueron unas Navidades familiares. Seguimos en contacto
ResponderEliminarEs complicado encontrar ese tiempo... Al menos intento estar en el presente cuando estoy con Peque y olvidarme de lo demás, pero confieso que aún no lo he conseguido tanto como me gustaría.
EliminarReal como la vida misma, jejejeje...
Muas!
Me ha encantado tu reflexion de hoy. Enhorabuena por esa relacion cobstruida a fuego lento con los peques de Mr.X, Espero que tu padre siga bien y que haya muchos monentazos de esos de azucar y canela en el futuro y que Peque siga tan adorable y tu sigas sabiendolo ayudar a crecer en todos los sentidos. Un besito Mo
ResponderEliminarLas cosas buenas llevan su tiempo, jejejeje...
EliminarMi padre sigue delicado, pero vivimos al día exprimiendo el presente. :)
Un abrazo guapetona.
Pues sí, criar necesita de eso tannn fácil y tannn difícil a la vez y la sociedad nos lo pone mas difícil que fácil!
ResponderEliminarYo quiero ver pelos, yo quiero, yo quiero!!! Jajaja ya me llegará el día o mejor dicho el tiempo.
Me alegro de esas adolescencias llevaderas, que sigan así! Los inicios tuvieron que ser apoteósicos con los nanos de por medio ;)
Muchos besicos playeros.
Jajaja quiero ver pelis!!!! ;)
EliminarEl sistema en el que vivimos no ayuda para nada...
EliminarMenos mal que quieres ver pelis y no pelos, jejejeje... XD Llegará, claro que sí, y podrás disfrutar de la magia del cine con tus nanos!!
De momento no me quejo, yo recuerdo peor mi propia adolescencia!! O_O
Muas!
Enhorabuena por esa familia tan estupenda que habéis formado!!! Tenéis muchísima suerte.
ResponderEliminarLa verdad es que, con tiempo libre, todo se toma con otra filosofía. Jajajaja. Besotes!!!
Ya te digo, jajajajaja!
EliminarGracias hermosa!
Besotes!
Con tiempo evitariamos muchas pataletas... porque ahora no podemos ni sentarnos con los peques para ver como solucionarlas....
ResponderEliminarLa verdad que con todo lo que te ha tocado vivir con la familia politica... si que ha sido una prueba de fuego, no todas tenemos que empezar con tres niños ajenos.... y convertirlos en propios....y visto lo visto, has superado la prueba estupendamente!!!
Me alegro que tu papi vaya poco a poco....
Besotes!!!
Ayyy, el tiempo... cómo da por saco, jajajaja!
EliminarCon lo de los niños, como decía más arriba, la ingenuidad jugó a mi favor, no tenía ni idea de lo que supone estar con alguien que es padre, pero como eran ellos eran chiquis, eso ayudó a que me integrasen con más facilidad. Más que propios, los he convertido en parte primordial de mi familia, pero entendiendo que ya tienen un padre y una madre que son los que deben tomar las decisiones importantes en lo que a ellos respecta. Creo que es importante hacer la distinción. Así -creo- no me han visto como una competidora de los afectos hacia su progenitora, sino como alguien "extra" con quien contar. :)
Mi papi jodidillo, pero vamos haciendo.
Muas!
Leyéndote ,me han recordado las ganas de ir al cine , ¡Pero no tengo tiempo! ,pero sí deseos .
ResponderEliminarSí que haces un balance de la Navidad tardío, pero las reflexiones que hacemos en perspectiva y con tiempo son más sabias. Con el paso del tiempo ,he aprendido a esperar los tiempos para todo y evitar el precipitarme para juzgar,opinar,reflexionar ....Y no ,la vida No es fácil así que es muy sabio valorar cuando eres afortunada ,para disfrutarlo mejor. ¡Uuyy ,peque comienza con las difíciles relaciones sociales! En cuanto a eso he pasado de todo , en cuanto a sucesos se refiere y siempre he reforzado a mis hijos para que enfrenten los "problemas" y también aprendan a pasar de lo que no merece la pena, pero a medida que pasan los cursos se complica ,¡Hay cada niño por culpa de su adulto padre!.
Buen fin de semana !!!
Siempre me gusta leerte, tienes un poso de tranquilidad y serenidad que me encanta. La vida no es fácil, desde luego, pero me gusta sentirme agradecida con lo que me ha tocado vivir, porque se disfruta más, a pesar de los pesares, que por supuesto, haylos.
EliminarYo también le digo a Peque que se centre en las personas que le aportan cosas positivas, pero de momento mis consejos no calan, jajajaja! (y conozco a los padres del niño que le zurró y son un encanto, yo creo que el rifirrafe fue mutuo...).
Besotes!
Olé el tomate volcán!! Por fin se ha secado jejeje.
ResponderEliminarMe has dado envidia con tus navidades: ver pelis, tiempo de calidad y momentos amorosos con Peque, esas galletas con tu padre... ha debido de ser genial.
Por cierto, que sepas que me has creado la necesidad de ver esa peli, ya te vale... ;)
Besos!!
Bueeeeno, eso de que se ha secado... Jajajajaja! Al menos lo suficiente para pintarlo! XD
EliminarNo me quejo de las Navidades, sobre todo por haber tenido a mi papi con nosotros, cosa que no tenía nada clara... Hay que pensar en positivo. :)
Ya me dirás que te parece!
Muas!
Vivimos a toda prisa: es difícil hacerlo de otra manera. Pero con tiempo y calma desde luego que todo suele ir mejor.
ResponderEliminarEs estupendo que todo fluya con los hijos de Mr.X y tuvo que ser difícil. Me alegro. Y también me alegra saber que te compartes tanto amor y cariño con tu padre. Es una relación muy hermosa.
Besotes!
Es un rollo vivir con prisa. Y eso que dentro de todo no me quejo, no tengo los peores horarios del mundo en ese sentido (sí en otros), pero el solo hecho de tener que cumplir con la agenda ya nos complica la existencia.
EliminarBesotes!
¿Desde cuando la lava es verde? ... pues sí, igualico, igualico, que el Tomatic, palabrita de seguidora del club super 3
ResponderEliminarYuhu!! Una seguidora de Tomatic, jajajaja! Yo los veo clavados!! XD
EliminarMuas!
qué genial tu padre pidiendo su espacio, se ve que con los hijos es un tira y afloja constante :)
ResponderEliminarme alegra ver familias bien avenidas, yo tengo dos hermanas mayores por parte de padre que están muy locas pero a las que no cambio por nada :)
Aix... Te leo después de que mi padre no esté... Pero empieza a doler menos pensar en él, y me gusta recordarle reclamando su espacio.
EliminarUn besote.