martes, 2 de junio de 2015

Volverte a ver


Me faltó un capítulo importante en la crónica del viaje a Buenos Aires e Iguazú: el retonno, que dirían Martes y Trece.

Tengo que confesar que durante nuestro periplo argentino eché de menos a Peque en su justa medida (por ejemplo cuando visitábamos sitios que a él le hubiesen gustado o cuando recibía noticias suyas por whatsapp...), pero fue bastante más soportable de lo que había imaginado. Eso sí, una vez emprendimos el camino de vuelta, el gusanillo de estrujarlo entre mis brazos se transformó en un Tiranosaurio Rex XXL que rugía en mis mundos interiores.

Una vez aterrizados en tierras catalanas, lo llamé por teléfono para anunciarle nuestra inminente llegada, y él empezó a explicarme miles de cosas. Lo que me asombró es lo rarísima que se me hizo su voz y su manera de explicarme todo. Al colgar le dije a Mr. X que no entendía como en sólo diez días podía haberme olvidado de su forma de hablar. Sentí una mezcla de sorpresa y "malamadrismo" galopantes.

Cuando llegamos a casa de mi suegra, donde nos esperaba la familia, el T-Rex ya había hecho un boquete en mis entrañas. Al abrir la puerta y ver a Peque se me nubló la vista momentáneamente por los lagrimones y me tembló la voz, pero percibirlo tan contento me ayudó a reprimir un poco mi ñoñez (no sé por qué me reprimo, pero he constatado que lo hago).

Peque nos achuchaba, hablaba, enseñaba cosas... Histriónico total. Y me quedé alucinada cuando en un momento dado me miró y me dijo: "Mami, me había olvidado de cómo hablábamos". ¿Es o no es una pedazo sincronía materno-filial?

En cualquier caso, tras tres días de romance y reencuentro, Peque empezó a volver a su ser, con sus rabietas tremebundas y su pasotismo propio de la edad, y yo también volví a mi ser, esa madre pesada y repetitiva hasta la saciedad. 

Bendita normalidad.




21 comentarios:

  1. ¡Qué bonito, Mo!

    Lo de ir sin el niño y pensar en lo que le gustaría del lugar donde no está creo que es inevitable jajaja

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya te digo, Eva, sobre todo viendo tantos bichos exóticos de los que a él le molan!!! XD
      Muas!

      Eliminar
  2. Hola. bendita rutina... la verdad es que ellos no sufren tanto como nosotras de las ausencias... pero siempre es emotivo el reencuentro. Ya leo que tu hija y tu estais en conexión..... seguimos en contacto

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es un nene, jejejeje!
      Y sí, creo que tenemos una conexión la mar de buena. :)
      Besos!

      Eliminar
  3. ¿Cambiamos en la distancia...? Puede ser. Quizas sea el cambio de aires, que nos vuelve tranquilos, lacónicos... Pero, como dices, bendita rutina.

    Besotes gordos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que sí, algo tenemos que cambiar. Día a día, es inevitable!
      Besototes!

      Eliminar
  4. Ohhhh, qué bonito! A mí me parece la mejor parte del viaje, el reencuentro, jijiji

    Feliz día!

    ResponderEliminar
  5. jajajaj que bueno ... olvidarse de como hablamos dice ... que sensoriales que somos, me encanta!!

    ResponderEliminar
  6. jajajaj que bueno ... olvidarse de como hablamos dice ... que sensoriales que somos, me encanta!!

    ResponderEliminar
  7. Mo,te entiendo perfectamente porque a mí eso me ha pasado exactamente igual. Y más cuando estás acostumbrada a estar siempre junto a él y tienes esa separación aunque solo sean 10 días, es como volver a reconocerle, encuentras que habla distinto , que tiene frases nuevas ,aunque como bien dices, una vez pasada la "novedad" instalados en la rutina todo parece igual.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Supongo que es eso, que estando con él a diario tantas horas no aprecio los pequeños cambios, y al pasar un tiempo más largo sin verle se me han hecho evidentes montones de cosas!
      Besotes!

      Eliminar
  8. Qué curioso que los dos hayáis tenido la misma sensación. Eso sí que es conexión materno-filial. Jajajaja. Un besote y a disfrutar de él ahora que lo tienes cerquita.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso, a disfrutar a tope! Con el veranito inminente, qué ganas le tengooooo! XD
      Muas!

      Eliminar
  9. Qué curioso... bien es cierto que la voz al teléfono no suena igual, pero no sé... a mí me resulta muy curioso cuando oigo a mi peque por teléfono porque no parece su voz y como esto ocurre pocas veces, siempre me quedo muy extrañada y me descubro casi analizando su timbre de voz, jajaja. Me alegro que de esa experiencia enriquecedora en todo su conjunto.

    Besotes!!!.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto lo del teléfono, yo también lo pienso cuando hablo con él así! Pero me impacto no solo el tono sino su forma de explicarme las cosas, las frases... Me pareció muy mayor!!
      Besotes hermosa!

      Eliminar
  10. Ay, ese tiranosaurio rex que bien me lo conozco yo... los reencuentros son geniales, y la vuelta a la rutina también.
    Llevo una temporada desconectada y estoy deseando ponerme al día con tu aventura argentina... para que se me pongan los dientes largos ;)
    Besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tú sabes mucho de reencuentros sabrosones!!
      Ya me dirás qué te parece la crónica. :)
      Muas!

      Eliminar
  11. qué divertida conexión! nada me gustaba más que mis padres viajaran y me dejaran con mis abuelos, nunca entendí el drama de mi hermana y por qué mi mamá llamaba cada día! Y sabes qué? Lleva mi madre aquí más de un mes y mi hermana la llama TOOOOODOS los días! yo de normal me comunico una vez a la semana y que se den por bien servidos xD como son de curiosas las relaciones!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí me gustaba quedarme con mi abuela, pero me costaba separarme de mis padres, nos llamábamos a diario... Me parece que yo soy como tu madre y tu hermana, jajajaja! Veremos por dónde sale Peque!
      Besotes!

      Eliminar