Tengo un llavero "kitsch". Creo que alguna vez lo he dicho. De él pende un marco de metacrilato con una foto de Peque. Durante mucho tiempo, miraba a Peque y miraba la foto y las diferencias eran ínfimas. Mismos mofletes gorditos, mismos ojos risueños, misma boquita de bebé. Pero hoy, al usar las llaves para abrir la puerta del curro, me he dado cuenta de que poco queda de ese bebote de un añito y algo. Lo sé, lo sé...el típico discurso materno sobre el paso del tiempo y blablabla.
Sí, supongo que es mucho de eso y mucho también sobre el tiempo en sí, así, como cuestión genérica. De pequeña escribí más de un cuento sobre viajes en el tiempo. Es un tema que me fascinaba y sigue haciéndolo. Y es que parece que estos días es mi tema number one en el cabolo: tiempo parriba, tiempo pabajo.
El finde estaba organizando papeles (una de mis aficiones top-ten, organizar cosas, qué delirio...) y encontré unas cartas de amor que me había escrito Mr. X en el origen de los tiempos. Qué tierno, qué enamoraditos, qué precioso todo...Y es una sensación extraña. Te reconoces en las frases y sentimientos, y a la vez notas todo lo que difiere de aquel ayer. Sin ir más lejos, la existencia de Peque, que entonces aún dudaba que un día pudiese materializarse.
Esta semana hemos puesto en marcha la maquinaria bodil, lo que viene siendo ir al Registro Civil para rellenar la solicitud de matrimonio. Yo pensaba que la visita en cuestión me daría material del bueno para el blog con aventuras de mil contratiempos, papeles que faltaban, y esas cosas. Pero no, todo fue rodado. A ver, colas hicimos, para qué nos vamos a engañar, pero dentro de lo que cabe fue más que soportable. Y quiero romper una lanza a favor de la pobre figura del funcionario, que suele tener una fama tirando a chunga. Todo el personal que nos atendió fue competente y además encantador. Que no es fácil cuando tienes por delante doscientos clientes por atender (sin exagerar). Mi momento "tiempo" vino al recoger nuestros certificados de nacimiento. Ver la firma de nuestros padres, que ya no están, retrotraerse a ese hito en sus vidas (y en las nuestras, claro). Fue algo mágico. Levemente melancólico, pero mágico.
Y para acabar, me estoy leyendo la novela "22/11/63" de Stephen King. Cómo no, trata de un viajero en el tiempo. Que además va y viene unas cuantas veces para pillarle el tranquillo al tema. Me gusta mucho como escribe este hombre. Mi madre era fan de su género de terror. A mí me mola más en la vertiente fantástica o de ciencia ficción. Sea como sea, cuando empiezo un libro suyo lo devoro. Y en esas estamos, poniéndome cada día en la piel de Jake Epping y preguntándome, como ya hacía de niña y adolescente, a qué momento de la historia de la humanidad viajaría si eso fuese posible.
Tiempo al tiempo.
Entrada un tanto melancólica.. no sé qué decirte porque estas últimas semanas he tenido mucho de recordar, rememorar y añorar tal vez otros tiempos... esa mezcla de sentimientos...
ResponderEliminarMuchos Besotes!!!.
Creo que estoy en mis días melancólicos del mes, jajajajaja!
EliminarSí, hay cosas que hacen pensar y recordar...pero eso no tiene por qué ser malo.
Un besote!
Claro que si, tienes toda la razón :-*
Eliminar;)
EliminarMuas!
Yo también estoy dando muchas vueltas al tiempo, al traer a pequebatallas a casa y compararlo con su hermano, piensas pero cuando se hizo así de grande?? jaja, tengo medio escrita una entrada sobre este sentimiento que marcó la vuelta a casa. Por otro lado de lo que se trata es de verlos crecer...
ResponderEliminarCon respecto a la boda, no desesperes seguro que te da para entradas de blog, si yo hubiera tenido uno cuando organizamos la boda, me habría dado para dos cientas entradas, porque no se que no nos paso. Un beso
Ya te digo...cuando veo los bebitos recién nacidos de amigas mías, a Peque lo veo enooooorme! Pero sí, la maravilla es acompañarlos en su crecimiento.
EliminarNo dudo que la boda me dará tema, pero fíjate tú que pensaba que el papeleo sería más complicao, jajajaja!
Besotes!
Como pasa el tiempo, es increíble...
ResponderEliminarEn cuanto a las aventuras que dan para post, no te mortifiques, que esas llegan solas xD
Jajajajajaja! Toda la razón, mortificación cero! ;)
EliminarMuas!
uff, es que el tiempo es así de caprichoso deseas que sea ya fin de semana y cuando te das cuenta ha pasado y ya estas otra vez en lunes... así pasan las semana y los años... a la velocidad de la luz, lo importante es saber pararse y disfurtarlos.
ResponderEliminarYo no me preocuparía mucho, seguro que el bodorrio y todas sus tareas te dan para mas de una entrada!!
petoents floreta
A partir de una cierta edad todo se acelera cosa mala...Opino lo mismo que tú, hay que disfrutar. :)
EliminarPetons!
Pues has tenido mucha suerte en el registro civil. Pero no te apures, que las bodas dan para muchas entradas! Claro, que mi suicida idea de prepararla en dos meses, ayudó bastante.
ResponderEliminarEl tiempo pasa volando, y cuando tenemos algo con que compararlo, pues se hace más evidente. Como también se hacen más evidentes las faltas en los momentos felices. Descubrí qué día había fallecido el padre de marido, durante los preparativos de la boda, y algunos otros detalles. Después de ocho años nunca había hablado de ello.
Un besote
Es que maja, dos meses...a mí me da algo!
EliminarQué curioso lo del papi de tu marido...era el momento, sin duda.
Un abrazote!
No conozco ese libro, cuando lo termines me dices si me lo recomiendas.
ResponderEliminarEl tiempo... mmm... yo también pienso mucho en lo rápido que pasa la vida...
Besos
Aún no he llegado ni a la mitad (es un tocho de casi 900 páginas), pero ya te lo recomiendo. Sea cual sea el final, para mí vale la pena.
EliminarLas dos pensamos lo mismo, pues...
Muas!
Una entrada muy 'otoñal'... de melancolía de tarde de lluvia y un té entre las manos... ji!
ResponderEliminarYo también guardo cartas y poemas... snif...
Besitos!
Sí, hoy me he despertado nostálgica...Que llegue el verano ya! Bueno, paso a paso, que aún tengo mucho curro bodil por delante...(el vivo ejemplo de la contradicción). ;)
EliminarBesotes!
Ais, si es que nos crecen, nos casamos y se nos formaliza la vida... Viaje en el tiempo ya! Jaja. Un besete bela!
ResponderEliminarQué cosas...¿Dónde nos vamos de viaje "temporal", Madi? XD
EliminarMuas crack!!
Los niños nos hacen conscientes del paso del tiempo más rápido que otras cosas. De repente se escapan esos bebés de las fotos y vienen unos niños que te dan mil aventuras que contar.
ResponderEliminarY las bodas también, algún detalle tendrás que contar.
Yo adoro esos momentos de encontrar cositas de cuando éramos novios, notitas en los apuntes... detalles adorables y que te recuerdan días felices. Dan ganas de revivir el momento...
Besos.
Sí, ahora es todo "entonces Peque no había nacido"..."Peque aquel verano tenía un añito"...Nuestro reloj vital caminante.
EliminarDigo yo que algo con enjundia me dará esta boda, jajajaja!
Besotes!
Crecen demasiado deprisa para mi gusto ;)
ResponderEliminarY yo también quiero detalles de la boda!!!! :D
Un besote
Sí, también para el mío, jejejeje...
EliminarLos habrá, los habrá! :D
Muas!
ay, cómo crecen...M. ha aprendido a andar no hace mucho...y cuando me giro y no está, que se ha ido a la habitación de al lado, me parece mentira que ya no haga falta que yo esté a cinco centímetros de él para poder desplazarse...ay! me ha emocionado lo de la firma de los papás, Mo.
ResponderEliminarun besito!
Yo también me emocioné al ver los certificados...Y pensar que mi madre era diez años más joven que yo ahora al estampar su firma...El tiempo es una cosa extraña.
EliminarBesotes!
Es curioso, pero en este post combinas dos temas que son mis "puntos divisorios". Ahora en nuestras vidas todo es de antes de casarnos o de después de casarnos, o bien de antes de nacer Redondo o de después de nacer Redondo. "¿Te acuerdas de cuando fuimos a tal sitio? si, eso fue antes de casarnos" o "¿hace mucho que hicimos esto? pues ya había nacido Redondo"
ResponderEliminarEs increíble como puede cambiar todo en tan poco tiempo...
Besos!
Yo creo que a mí me ocurrirá lo mismo con la boda...¡Son nuestros hitos! :D
EliminarMuas!
En mi adolescencia tuve una época en que estuve obsesionada con el tiempo. La verdad es que es una cosa muy fascinante... Por cierto, tengo que leer ese libro de Stephen King, que yo también soy super fan. Besotes!!!
ResponderEliminarTe lo tienes que pillar Álter, es una caña!
EliminarBesotes!
¿Cómo consigues que por mucho tiempo que pase, siempre acabe leyéndote con una sonrisa?...
ResponderEliminarUn abrazo y feliz finde.
Porque tú la sonrisa la traes de serie, hermosa...;)
EliminarMuuuas!
Qué bien escribes amiga. Siempre que te leo, me trasnportas a ti, como si fuera yo misma la que vivo estas cosas. Es algo así como magia.
ResponderEliminarUn abrazo grande linda Mo
Qué bonito Carmen...Gracias por estar aquí.
EliminarBesotote!
que bien verte tan ilusionada ... estoy deseando leer más de este proceso tan bonito y dulce...
ResponderEliminarUn besote guapa!!
Aix, sí...nunca pensé que iba a disfrutarlo tanto! :D
EliminarMuas!
Mo:
ResponderEliminarEl pasado, el presente y el futuro, se combinan perfectamente en nuestra vida, para hacernos más plenos y vivir cada etapa, de la mejor manera..., solo hay que disfrutar cada momento al máximo.
Seguro que los preparativos de la boda resultarán perfectos y esperemos que sin ningún problema...
Yo sigo pasando de la ceremonia religiosa..., creo que soy tan cabezota, que no podría estar tranquila ningún minuto jajaja.
Un abrazo y mucha suerte!!!!!
Me ha gustado mucho esa primera frase. Toda la razón!
EliminarA ver si al final te animarás con esa ceremonia, jejejeje...
Besotes!
Con los peques ya se sabe... cuando tienes uno de esos días, deseas que sean mayores y se vayan de casa... y cuando se hacen mayores y se van de casa, te gustaría que fueran pequeños e hicieran trastadas... la vida en una contradicción en sí misma.
ResponderEliminarBesotes
Uixa, calla, calla, que eso de que se vaya de casa no me ha molado imaginármelo!!! Menos mal que aún queda un rato largo, jajajajaja!
EliminarUn beso!