martes, 10 de diciembre de 2013

Juegos de invierno


Mi nevera apesta. Hiede. Huele mal. Muy mal. Y no, no se me ha podrido nada dentro (que yo sepa). En principio uno no pensaría que el título del post y esta primera frase puedan tener algo en común, peeero...

Este fin de semana pasado la hermana de Mr. X nos invitó a pasar unos días en su casa de la montaña. De año en año hacemos una visitilla al pueblo francés en el que tienen la casita y ello trae implícitas tres tradiciones: comer todo tipo de delicatessen francesas que provocan que mis pantalones se declaren en huelga; hacer excursiones por el lugar (con el pretexto de quemar calorías, cuando lo cierto es que las calorías ingeridas no se queman ni en cinco triatlones) y adquirir pestilentes -y sabrosos- quesos gabachos. He aquí la relación inequívoca entre la fetidez de mi nevera y el sano deporte pirenaico.

Este año me apetecía mucho ir a las montañas por estas fechas por eso de hacer feliz a mi churumbel. Y es que desde que alguien pronunció la palabra "Navidad" él me ha estado preguntado cuándo nevaría. Le he intentado inculcar lo de las latitudes y demás sutilezas que tiene la ciencia de la geografía, pero sigue sin digerir que a nuestra mediterránea ciudad no la cubra un metro de nieve.

La primera actividad que nos propuso mi cuñada fue una excursión con raquetas. Ojo, raquetas para los pies (ya, igual soy la única palurda que la primera vez que visualizó un paseo de ese tipo no acababa de entender que ventaja tenía ir con raquetas de tenis en las manos...). Por suerte esta vez me pillaba experimentada y ya sabía de qué iba el tema. Lo malo fue darme cuenta de que mis tejanos no eran el atuendo más idóneo para la ocasión (que yo pensaba que habría algo de nieve, pero no metro y medio). Por suerte mi querido Mr. X iba preparado por los dos y me prestó unos pantalones aislantes para poner encima de mis vaqueros. Pero no queráis imaginaros la extraña combinación de colores y texturas que conformó mi outfit final. Vamos, que todos iban ideales de la muerte con su ropita fashion para la nieve y Peque y yo (que él también iba poco preparado y rapiñó de unos y otros) parecíamos la Sra. Yeti y su cría por el volumen extraño de nuestros ropajes. Eso sí, en colorines.

El paseo fue de lo más idílico. El cielo azul, el aire puro, la nieve virgen cubriendo el paisaje...Todos íbamos con raquetas excepto Peque, al que acomodamos en un trineo plasticoso, pero de lo más efectivo, que le servía para desplazarse cual maharajá por el monte. Mi cuñado tiraba de él y parecía de lo más liviano. A la vuelta, tras lanzarnos en trineo un rato por una ladera y haber hecho el consabido muñeco de nieve, decidí llevar yo a mi niño. Lo puse en su trineo y me dediqué animosa a la tarea de estirar. Pero íbamos de subida. Comencé a sudar como un pollo dentro de mi cueva de goretex y me resistí a pedir auxilio en un ataque de madrecorajismo de tres al cuarto. Ni que decir tiene que a los cinco minutos abandoné la gesta en aras de mi supervivencia, antes de que una lipotimia decidiese por mí.

Al día siguiente la actividad planificada consistió en pasear por unas pistas de esquí que han cerrado temporalmente y deslizarnos en trineo y "culenbajen" (cosas de jerga de la familia de mi futuro marido) a lo XL. Escogieron la pista más empinada que encontraron y venga, subiendo que es gerundio. Lo mío es el agua, pero en fase líquida y en formato piscina a poder ser, lo de caminar cuesta arriba por una pedazo montaña nevada como que me deja fuera de juego. Mr. X, churumbeles varios y mis cuñados subían a paso ligero mientras yo empezaba a notar como el corazón se me desbocaba y la visión se me hacía borrosa. Cada vez que pensaba que habíamos llegado a la cima ellos querían subir un poquito más. Ni que decir tiene que iba la última de la fila. El último tramo me dejó exhausta. Me quemaba respirar y cada paso que daba me hundía en la nieve hasta las rodillas. Ellos ya habían llegado al destino elegido para tirarnos y estaban haciendo fotos, comiendo mandarinas y mirándome descojonados de la risa mientras yo agonizaba en mi escalada. Pero bueno, llegué. A rastras, pero llegué.
Para bajar elegí un "culenbajen" rojo chillón, aposenté mi cuerpo serrano en el artefacto, grité "Gerónimoooooo" y me lancé cuesta abajo. Pero no pasó nada. Tanta raclette y magret de pato habían surtido efecto y mis lorzas quedaron encalladas en la nieve. Cinco empujones más tarde logré coger algo de impulso...y alcancé lo que mi amiga E llama velocidad absurda (o sea, mucha). En medio de risas histéricas y auténtico pavor noté como el hielo empezaba a colarse por la ropa congelándome la espalda y aledaños y de pronto un desvío en la trayectoria me giró y me dejó deslizándome al revés hasta que una elegante pirueta croquetil acabó con mi aventura. Acabé empapada, haciendo el capullo delante de todos y tiesa de frío. Pero repetí dos veces, así que está claro que me va la marcha.

Después de comer emprendimos el camino de vuelta a una hora que creímos lo suficientemente prudente para no comernos la caravana de vuelta. Los cojones. Nos la comimos con patatas. Cuatro horas para un trayecto de dos. Y yo pensaba que el más problemático sería Peque, pero, oh sorpresa, fue mucho peor gestionar las broncas de las dos adolescentes que compartían el cubículo. Vamos, que semejante tortura debería estar prohibida por la convención de Ginebra. Pero sobrevivimos, llegamos, y aquí estoy para contarlo. Y lo bien que nos lo pasamos, oye.



32 comentarios:

  1. ¡Jajajajaja! Te has ganado el premio a Súper Madre 2013. Qué valor, nena, qué VALOR... Aunque huelan mal, ¿qué tal están esos quesitos?...
    Un abrazo en forma de bola de nieve.

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    1. Valor no, inconsciencia Terapeuta, inconsciencia...jajajajaja!
      Los quesitos de vicio, qué cosa más buena!!
      Muas!

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  2. Jajaja, siempre es un gustazo leerte porque es que me parto contigo, acabo fijo mínimo con una gran sonrisa adornándome la jeta X^D. Te diré que me he visto a mí misma subiendo, muriéndome, mientras los demás subes incluso silboteando (ese es mi chico, que le da por silbar). Y yo pillo mosqueos del ocho por no poder, por ver que los demás si, porque otros encima pueden hasta silbar, porque quiero ir más rápido y acabar... en fin... para qué contarte. En lo que explicar al peque lo de que por aquí no nieva, estamos a la par, se vuelve loco y se pone que no veas porque le digo que aquí no llueve; pero es que quiere salir y coger la tabla de snowboard o similar (que no sé de dónde piensa que la vamos a sacar y que tampoco se le ocurren nunca cosas tranquilitas) y liarse a delizar y saltar por los aires en las montañas nevadas... en fin...

    En lo de los quesos huelan lo mal que huelan, pero ¿y los ricos que están?, eeehhhhh.

    Muchos Besotes Guapaaaa!!!!.

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    1. Aquí ha nevado alguna vez, pero poca cosa...comparado con lo que los niños querrían, una nimiedad, desde luego!
      Hay algún queso que me tira patrás con su "aroma", pero con taparse la nariz asunto solucionado, jejejeje!
      Besotes!

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  3. jaja, me has sacado una sonrisa te he visto cual bridget jones en la peli. La verdad es que aunque suena cansado también tiene que haber sido estupendo disfrutar de unos días y de otro entorno. Un beso enorme y fijo que has bajado algo de la comida.

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    1. Un poco Bridget Jones sí que parecía sí...(bueno, hibridada con la Sra. Yeti, jajajaja!).
      Yo es que tengo poca resistencia, no era tan duro. Y sí, la comida me ha bajado. Del estómago al culo, para ser exactos. ;P
      Muas!

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  4. Que diver!
    La primera vez que yo fui a esquiar, también llevaba unas pintas poco ortodoxas, las gafas de nieve que me dejaron... papito se parte cuando ve las fotos!

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    1. Jajajaja! Es que los atuendos prestados pueden ser lo peor...
      Besotes!

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  5. jajaja, me parto contigo!!!
    Que me imagino yo en mi torpeza, y haciendo los mismos giros y croquetas que tú!
    Pero desde luego, se ve que habéis disfrutado, habéis quitado a peque el mono de nieve y os habéis echado unas buenas risas y buenas comilonas.
    Deliciosos quesos franceses!!
    Muaks

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    1. Deliciosos, sí!
      Yo era la más torpe del grupo con diferencia...pero bueno, si cambiamos nieve por pista de hielo tampoco se me da tan mal (o se me daba, que ahora debo haber perdido cualquier atisbo de equilibrio con los años que hace que no practico!!).
      Muas!

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  6. Me he meado de risa imaginando la estampa, qué bueno!!, jajajajajajajaja
    Tienes más moral!. Ese momento geronimo encallada es mucho.
    Besos

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    1. Es que se me da de lujo hacer el capullo, jajajaja!
      Besotes guapetona!

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  7. Ains Mo, me ha literalmente descojonado el tiempo que estaba riendo esto, casí me dá un síncope. Mi pareja me decía que parara o me daba un telele. Le he leido luego el post en plan declamación Shakespiriana y lo ha entendido. Yo historias de nieve más bien pocas como tú. Puedo contar histórias de caminar por la arena, aunque evientemente sin las cuestas de una pista de patinaje.
    Nota: A partir de la Sr. Yeti el descojone ha sido incontrolado.
    Un beso y que vivan las piscinas climatizadas.

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    1. Jajajaja! Muchas gracias maja! Eres una lectora de lo más motivadora!! :)
      Muas!

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  8. Mo:
    Genial experiencia has vivido y me he imaginado todo, todito, con lujo de detalles!!!. Que ganas de que hubieras subido fotos de sus atuendos...
    Me parece que aunque te empaparas, todo lo vivido, valió la pena y con creces. Mmmmmm, que ricos deben ser esos quesitos!!!!.
    Un beso, preciosa!

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    1. Créeme guapetona, más vale no verme de esa guisa, jajajajaja! ;P
      Besotes!

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  9. Nunca he probado un queso que me oliese mal, es superior a mí. Como esos quesos que parecen llenos de "mo" y cosas verdes, que dicen ser azules, que incluso parecen moverse... buf... Me quedan tantas cosas por probar en esta vida. A este paso se me va a hacer corta.

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    1. Pues atrévete algún día, seguro que te sorprende!! :D
      Muas!

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  10. Jajajaja. Menuda aventura... A mí no me pillan en una de ésas ni harta de vino. Bueno, a lo mejor si lo pienso desde el punto de vista de que luego voy a poder escribir una entrada... Besotes!!

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    1. A mí la nieve me mola (y el trineo ni te cuento), lo que llevo peor es emular a Edmund Hillary, jejejejejeje...
      Muas!

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  11. Jo, que chulada¡ Te entiendo mucho lo del Outfit,a mi me pasa lo mismo incluso peor, sé que seré la "maki" del grupo pero me niego a comprarme nada para un día, 2 a lo sumo, que entra la nieve en mi vida y mi familia gabachil va de portada de anuncio¡
    Peque habrá disfrutado de lo lindo¡¡
    Besotes¡¡

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    1. Me consuela saber que no soy la única que no va a la última a la nieve, jejejeje!
      Disfrutamos mucho, sí!
      Besotes!

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  12. Jajaja...Briget Jones a tope!!! A mi me pasaríalo mismito!!! Jajaja... pero eso sí, el peque se lo habrá pasado pipa!!!

    Besetes!

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    1. Para Peque la diversión era doble, por un lado la nieve y por el otro yo con mis trompazos... ;)
      Muas!

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  13. Jjjajja Mo!! Ains pobre, te he imaginado subida en el culenbajen y con la nieve entrándote, pobrecilla, pero oye, lo importante es lo bien que te lo pasaste (en el fondo el agua en formato blanco también te gusta ajajjaj). Umm quién pudiera echar una olisqueadita a tu nevera (e hincar el diente también ejjejej).

    Un besazo guapísima!!

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    1. Hombre, oler mi nevera en estos momentos no es muy recomendable, pero catar su contenido sí, jejejejeje!
      Besotes!

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  14. ¡¡Te pasó de todo!! Y a pesar de todo se ve que te lo pasaste genial jajaja

    Me encanta tu buen humor. Se me saltaban las lágrimas de la risa leyéndote

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    1. Gracias guapetona! No sé yo si tengo un humor tan bueno, pero se intenta, jejejeje...
      Muas!

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  15. Me has recordado el mes de enero que hice algo parecido con unos amigos y tanto la indumentaria como las bajadas y subidas las recuerdo igual. Un finde así es reparador, eh? Bsssss

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    1. Sí, sienta muuuy bien alejarse de la ciudad y conectar con la naturaleza (y eso lo dice una urbanita redomada).
      Besotes!

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  16. Loq ue se desprende de este magnífico texto que es que te lo has pasado genial y es lo que cuenta!! los moretones y agujetas,.... parte del entretenimiento!!
    Bones festes i a seguir gaudint!!
    petonets

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    1. Ayyy, las agujetas!!!! Menudo lunes pasé!!! Pero valió la pena, jejeje...
      Petonets!

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