viernes, 6 de julio de 2012
H 2 0
Ayer, por un instante, me retrotraje a mi infancia de una forma muy vívida.
Yo soy muy tiquismiquis con el agua mineral. No bebo agua del grifo si puedo evitarlo, me sabe a rayos, y de pequeña tuve una gastroenteritis que mi médico atribuyó al agua corriente de casa, con lo que acabé de cogerle manía. Y aunque muchas personas me dicen que son tonterías y que todas las aguas saben igual, puedo demostrar mis habilidades como catadora del líquido elemento con los ojos cerrados y no me equivoco. En los últimos años me he hecho fan de una marca concreta y las demás, desde mi humilde punto de vista, no le llegan a la suela de los zapatos.
El caso es que el otro día andaba medio deshidratada y me compré una botella de agua justo antes de entrar a trabajar. Para infortunio mío no tenían ni mi marca preferida ni ninguna de las que compro de forma alternativa. Sólo había un agua de marca blanca y etiqueta cutrilla...Pero ante la deshidratación que me estaba dejando sequitas todas las células de mi ser, las neuronas que me quedaban activas dijeron "qué más da, ¡es aguaaaa!". Así que la compré y le pegué un sorbo nada más salir de la tienda.
Y entonces vino el flash. Hacía muchos años que no pensaba en ello.
Cuando yo era pequeña (unos siete años, quizás) y mi madre me dejaba a comer en el cole, siempre le decía que el agua que allí servían sabía a ballena. Tal cual. La gente me miraba raro. Está claro que nunca he probado una ballena, pero recuerdo a la perfección el sabor que me evocaba esa afirmación. Y es que además para mí estaba clarísimo, tenía gusto de ballena. Y no era porque fuese tirando a salada, no, era un sabor que se me antojaba cavernoso, de musgos, tormentas en alta mar y ballenas grandes y azules.
Quien sabe, quizás en otra vida perseguí a Moby Dick. Si mi Peque me alucina con paranoias como esta pienso escucharlo con toda la fascinación del mundo. Me maravilla lo que una mente sin filtros y censuras puede ofrecer a quien quiera estar ahí para presenciarlo. Me maravilla el universo de los niños.
¡Buen finde!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Fíjate, pues has comentado lo del agua que sabe a ballena y me ha venido un gusto a la mente, creo que sé a lo que te refieres...Creo que los niños saben muy bien definir las sensaciones, mejor que muchos adultos.
ResponderEliminarY yo también soy fan de una marca en concreto, supongo que será la misma, que hace que me sepa a grifo el resto.
Un abrazo!!
Qué bueno que sepas a qué sabor me refiero, yo que pensaba que nadie lo entendería!
EliminarAhora tengo curiosidad por saber qué agua te gusta, jejeje...
Besos!
Al fin vamos a diferir en algo! Yo soy fan del agua del grifo y me la estoy bebiendo hasta aquí, en El Cairo! Eso si, tengo un filtro especial en la cocina, si no, no hay huevos...
ResponderEliminarMe queda la curiosidad de saber la marca...
Bueno sister, las diferencias dan vidilla, jejeje...
EliminarMi marca preferida rima fantásticamente con cebolla ;)
Muas!
Y a mi me ha maravillado esa descripción del sabor!!! Yo también soy delicadilla con el agua, la del grifo ni me la planteo. Ojala Peque te deleite con estas descripciones y nosotros seamos testigos :)
ResponderEliminarLa verdad es que lo he descrito con las imágenes mentales que me evoca el sabor, me alegro de que te haya gustado!
EliminarBesitos!
Jajajaja me has dejado imaginando cómo sería el gusto a ballena y creo que lo he conseguido jajaja. Me acordaré de ti siempre que beba alguna de esas botellas de agua (por aquí no se bebe agua del grifo) ;)
ResponderEliminarBesos
Jajajaja! Reconozco que si yo no supiese a la perfección como sabe me costaría imaginarlo!
EliminarBesos!
Es curioso cómo pueden de ser de evocadores los sabores y sobre todo los olores. Te llevan a mil y una vivencia y aventuras.
ResponderEliminarPor cierto, yo siempre bebo agua del grifo :)
Muac
Sí, nos transportan directamente a algún rincón de nuestra existencia...
EliminarBesitos!
Vamos que de inolora, insabora e incolora ese agua nada de nada...
ResponderEliminarBuen finde guapetona.
Pues no, lo de insabora desde luego no va conmigo!
EliminarBuen finde!
Yo no la bebo si no es de mineralización débil, la culpa es de mi ex novio que estaba obsesionado con éso y con la cocción de aguas con sodio.
ResponderEliminarYo también soy de las de mineralización débil!
EliminarDori (la de Nemo) nos descubrió el idioma balleno y tú el sabor :o)
ResponderEliminarQue sepas que lo has descrito perfectamente.
Besos.
Ohhh, cuánto honor estar a la altura de Dori, con lo que me gusta ese pececillo!
EliminarUn besote!
Yo bebo agua del grifo, Madrid tiene muy buena agua, pero hay temporadas que sabe como ha lejía e incluso me huele mal y, por supuesto, dejo de tomarla y me paso a la mineral. ¡Ja, todas las aguas van a saber iguales, ja! A mí la que más me gusta es Aquarel y Solan de Cabras, sobre todo esta última, aunque para el bolsillo prefiero la primera. Y la tuya? Cuál es tu preferida? Me has dejado con la duda.
ResponderEliminarQue sepas que yo no he dicho que a ballena, pero sí es cierto que he probado algún agua mineral y he corrido a por la del grifo!!!!
Besitos y buena semana
Si quieres saber qué agua me gusta, le he dejado una pistilla a Drew y le he dicho a Opiniones Incorrectas que es de mineralización débil...
EliminarVa, te lo pongo fácil: me gusta el agua Bezoya!!! :)
Besitos!
Que buena tu anécdota. Y que capacidad de cata. Yo soy incapaz de distinguir una agua de otra :( Tengo muy poco paladar.
ResponderEliminarGracias por pasarte por mi blog, así me has dado la oportunidad de conocer el tuyo. Me gusta lo que leo. Ya me tienes como seguidora. Totalmenet de acuerdo: ¡Necesito más tiempo para leer posts!
Bienvenida al blog!
EliminarNos iremos leyendo entonces :)
Un beso!
Jejeje yo no soy nada delicada, pero mi mejor amiga es una clon tuyo y también fan de la que rima con cebolla jajaja! Creo que le pasa a muucha gente. Eres genial describiendo, la imaginación de los niños es lo más bonico! Besicos
ResponderEliminarGracias por tus piropos!
EliminarMe parece que las que amamos el agua que rima con cebolla somos legión...Mmmm, qué rica!
Besos!
Me encantó como describes el sabor que has percibido en el agua jajaja Yo tambien soy especial y no me gusta cualquier marca, aunque puedo soportar cualquiera, pero si tengo opciones, prefiero las que no saben a Ballena jajajaja, me encantó tu post, tratare de leer mas de tu blog...con tu permiso!
ResponderEliminarY sin mi permiso también! Encantada de tenerte por aquí!
EliminarUy, eso del sabor a ballena me ha dejado alucinada... Yo sí que bebo agua del grifo (menos cuando voy a Albacete, que ahí no hay quién se la beba). Un besote!!!
ResponderEliminarJajaja! Yo es que siempre voy con mi botellita de agua, así que corro escaso peligro de probar las aguas albaceteñas, jejeje...
EliminarUn besote!